Lo denunció la madre en redes sociales y
ante la comisaría de su ciudad, Tafí Viejo. Cuestionó a las autoridades del
colegio por no intervenir y pidió consciencia sobre el tema.
Tiene 10 años, vive en
Tafí Viejo, Tucumán, y el
jueves de la semana pasada no quiso ir a clases. A metros de la Escuela Fray
Cayetano Rodríguez, donde asiste en el turno tarde, tuvo una fuerte crisis,
comenzó a llorar y a vomitar. No era la primera vez que le pasaba algo así,
estos episodios se habían tornado cotidianos y hasta le subía la temperatura.
"No quería ir a la escuela", contó Tania, su mamá, en una
entrevista con un periodista local. Cuando supo la razón, se desarmó de dolor:
al nene le hacen bullying y
el cuadro se tornó inmanejable.
"El niño decía que los chicos de sexto grado lo molestaban,
pero nosotros le preguntábamos qué le hacían y él no respondía o sólo decía que
no había tenido un día bueno o que le habían golpeado la puerta",
explicó la mujer. Por esto ella intentó hablar con Norma Rodríguez, la
directora de la institución, y con Karina López, la maestra del curso, pero la
respuesta llegó demasiado tarde. Agobiado por el acoso, el niño se autolesionó
y puso en riesgo su vida aunque ya está fuera de peligro.
"Él repetía que lo molestaban, puse al tanto a la docente, me dijo que
iba a averiguar, pero no lo hizo", señaló Tania. Por aquella fuerte crisis
que ocurrió en la esquina del colegio, el menor terminó siendo
asistido en la Policlínica de Tafí Viejo. Allí lo atendió una médica que lo
cedó y pidió urgente derivación psicológica y psiquiatra.
La especialista de salud mental que lo entrevistó apenas lo vio fue
tajante, cortó la sesión, lo dejó dibujando y llamó a Tania: "mamá,
necesito urgente reunión con los directivos. Esto no puede seguir pasando. El bullying es
cierto, el acoso es real", le dijo.
Después ocurrió lo peor. Hastiado, el nene, se autolesionó.
"Los casos de bullying son
mega importantes, escuchen a sus hijos, presten atención así les parezca una
tontera. Hoy mi hijo de tanto cansancio acumulado y angustia se quiso matar y
las autoridades de la escuela Fray dejan mucho que desear. Dejen de minimizar y
justificar casos diciendo que son juegos, cruzaron todos los límites",
compartió Tania en una historia de redes sociales con una foto del menor
hospitalizado.
El caso tomó estado judicial. La madre realizó una denuncia formal en la
Comisaría Centro y al respecto, el comisario Gustavo Beltrán, jefe de zona
III de la Unidad Regional Norte, dijo que la víctima "tiene un trastorno
mixto en la conducta, viene sufriendo bullying por parte de
sus compañeros" y que "por tal motivo se dio intervención a la fiscalía
para que en Cámara Gesell se lo evalué y se determine el delito".