Las imágenes sirven para ilustrar una larga entrevista de 12 páginas en las que quien fuera secretaria de Estado de Igualdad durante el primer mandato de Macron y después ministra delegada de Ciudadanía, habla sobre temas como la libertad de las mujeres, la violencia machista y el feminismo, así como de ecología, cambio climático e incluso de literatura. Será la primera política francesa en aparecer en la portada de la emblemática revista erótica.
El medio francés Paris Match, que ha tenido acceso tanto al reportaje como a los retratos, define el trabajo fotográfico de “antología”, y explica que la integrante del Gobierno de Élisabeth Borne “posa toda sonrisas en diferentes posturas y diversos atuendos azules, blancos o rojos”, en referencia a los colores de la bandera francesa.
En la entrevista, la ministra da su visión de la mujer y de su libertad y, comparándose con la actriz Pamela Anderson, opina que aparecer en esos medios es un acto de emancipación.
“No cabe duda de que las seis fotos de una exministra de Igualdad de Género, publicadas en una publicación poco conocida por su feminismo, harán correr ríos de tinta y encontrarán numerosas reacciones en la clase política”, concluyen en el artículo de Paris Match, “dos efectos probablemente buscados tanto por el editor de Playboy como por la política”.
Tras conocerse la noticia Schiappa se expresó a través de sus redes: "Defender el derecho de las mujeres a disponer de su cuerpo está en todas partes y en todo momento. En Francia, las mujeres son libres. Con todo respeto a los reincidentes ya los hipócritas. #Playboy."
“Pensábamos que era una broma del Día de los Inocentes”, es lo que han opinado varios pesos pesados de la política francesa, incluidas personalidades de su propio partido político, La República en Marcha, que lidera el presidente Emmanuel Macron, según ha informado la cadena de televisión francesa BFMTV.
“La portada de Playboy es una doble provocación”, ha apuntado la eurodiputada Manon Aubry, del partido de izquierda La Francia Insumisa, en declaraciones a Paris Match, “una provocación feminista, por dar una entrevista para hablar de feminismo en un medio que ha transmitido clichés machistas, y una provocación a nivel social, en plena movilización por las pensiones”.