El Pozo de Vargas es la fosa de
inhumación clandestina con mayor número de identificaciones de Argentina. Está
ubicada en la ciudad tucumana de Tafí Viejo y funcionó durante el terrorismo de
Estado.
Con 40 metros, el Pozo de Vargas en primer momento se encontraba
dentro de una finca privada que pertenecía a Antonio Vargas , y fue construido
originalmente para proveer de agua a las antiguas locomotoras a vapor.
Por
Sofía Romera Zanoli, para Télam
A partir de
los testimonios de Pedro Mercado, Juan
Carlos Díaz y Santos Molina, quienes indicaron que el pozo era utilizado
para ocultar los cuerpos de personas que habían sido secuestradas y asesinadas
durante Operativo Independencia y la dictadura militar, se inició a fines del
2001 el primer relevamiento de la zona. De los 149 restos óseos que se encontraron,
116 ya fueron identificados .
El informe con las denuncias sobre la existencia de un pozo de inhumación clandestina se presentó en el Juzgado Federal de Tucumán, lo que dio lugar a una pericia en abril de 2002 y el comienzo de la investigación en el lugar.
El 10 de
febrero pasado, la Fundación Memorias e Identidades de Tucumán informó en un
documento que la investigación de la denominada causa "Pozo de
Vargas", luego de 20 años de trabajo, "ha llegado al final de la
excavación" .
"De
acuerdo con las últimas informaciones provistas por el Juzgado Federal II, bajo
el mando de Fernando Poviña, que tiene a cargo la causa, se ha terminado de
extraer todo el material óseo que se encontraba al interior del pozo , material
que ahora será analizado por los peritos del Equipo Argentino de Antropología
Forense (EAAF)", indicó el texto.
La Fundación
detalló que con esta investigación "se recuperaron los restos óseos de 149
personas, de los cuales 116 fueron identificadas a través de análisis de ADN,
ello implica que 33 personas que fueron víctimas de desaparición forzada no
pudieron ser identificadas ".
En tanto, días después la Unidad de Derechos Humanos de Tucumán, Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad aclaró que aún se encuentran pendientes de realización algunas "tareas periciales".
Ese
comunicado señaló que "el 2 de febrero, el juez Fernando Poviña ordenó
que, atento al estado en que se encuentra la excavación arqueológica, se
requiriera a los peritos del Colectivo de Arqueología Memoria e Identidad de
Tucumán (CAMIT), que trabaja en el lugar desde los inicios de la investigación,
la producción de un informe técnico".
"El
magistrado instó al CAMIT a concentrarse en las labores de zaranda, a los fines
de permitir el análisis pericial pertinente de los restos humanos
rescatados", se añadió. Por otro lado, se encomendó al perito geólogo que
interviene en el proceso la producción de un informe "técnico
adicional".
"De ello
surge que aún restan informes periciales tanto de los peritos del CAMIT como
del geólogo para controlar la tarea de recuperación de restos y elementos
asociados", agregó el informe.
La
historia de las víctimas del Pozo de Vargas
Marta
Rondoletto, presidenta de la Fundación Memorias e Identidades que comenzó su
labor en 2001 y familiar de cinco personas detenidas desparecidas, contó a
Télam los inicios de la investigación del Pozo.
"Al poco
tiempo de recuperada la democracia, en el año 84, un compañero ex preso
político conocido como 'Chueco' Rodríguez me habló de que había un pozo en el que
habían tirado personas , en ese entonces hicimos un recorrida por la zona
indicada, pero los vecinos decían no saber nada ", recordó la mujer.
Años después,
en 2001, "un señor llamado Pedro Mercado, muy cercano a mi familia, me
dijo había recibido de información de que en un pozo que era del ferrocarril,
en la zona de Los Pocitos, se habían arrojado un montón de gente, pero después
fue rellenado con cemento y tapado cuando se fue (Antonio) Bussi ",
relató.
Antonio
Domingo Bussi fue comandante en jefe del Operativo Independencia e interventor
militar de Tucumán durante la dictadura, y luego, ya en democracia, lograría
ser gobernador de la provincia por el voto popular entre 1995 y 1999 .
Beneficiado por las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, fue condenado a
perpetua en 2008 cuando se reabrieron los juicios por delitos de lesa
humanidad.
Los cinco
familiares detenidos desaparecidos de Rondoletto fueron encontrados en el Pozo
de Vargas .
Una vez hecha
la presentación judicial, el fuero federal "comenzó a realizar la
investigación, y para ello los familiares que estábamos convencidos que
efectivamente allí se podían encontrar pruebas , comenzamos a hacer toda una
tarea de buscar recursos económicos para sostener los requerimientos de
personas capacitadas en esa tarea y con la tecnología adecuada".
En julio de 2016 fueron identificados Jorge y Silvia, hermanos de Marta, y su madre María Cenador de Rondoletto, secuestrados el 2 de noviembre de 1976 junto a su padre Pedro y su cuñada Azucena Bermejo, embarazada de cuatro meses , durante un operativo realizado a plena luz del día y que incluyó cortes de calles y la ocupación de casas de los vecinos.
Meses después
la mujer recibió la notificación de que los restos de su padre y de su cuñada
también fueron identificados en el mismo lugar.
Al respecto,
la militante de Derechos Humanos manifestó que " da cierta tranquilidad
saber dónde están, pero al mismo tiempo una profunda indignación y bronca saber
finalmente cómo terminaron; es terrible, sin embargo, después de más de 40 años
es importante para mi familia conocer lo que pasó", aclaró.
"Como
militante y ciudadana considero que es fundamental que todas las
investigaciones de este tipo se cierren alcanzando la verdad de lo que ocurrió,
por eso me resulta importante que una parte de la investigación del pozo, que
es la excavación, haya concluido", sostuvo.
Sobre los más
de 30 restos que faltan identificar , Marta señaló que "por las
características del material óseo extraído y del lugar donde fueron hallados,
es difícil y lleva mucho trabajo terminar de separarlos del barro u otros
materiales , en especial los más pequeños".
"Después
de todo un proceso esos restos llegan a los laboratorios del EAAF para ser
identificados", graficó.
En el pozo
también se encontraron prendas de vestir y otros objetos que "la Justicia,
junto a los familiares, deberá determinar cómo proceder".
En Tucumán se
lleva a cabo la campaña "Acercate, te estamos buscando", destinada a
incentivar a las personas a dejar su muestra de sangre e incrementar las
muestras de ADN del Banco de Datos Genéticos y cotejarlas con los restos
recuperados de las víctimas de delitos de lesa humanidad.
La campaña es
llevada adelante por la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, a cargo
de Erica Brunotto, en el marco de la Campaña de Iniciativa Latinoamericana para
la Identificación de Personas Desaparecidas (ILID).
Fuente: Telam