Gastón Guerra, Sabrina Basile, Jonathan Morel y Leonardo Sosa, los cuatro apresados, referentes militantes de Revolución Federal.
Las detenciones se produjeron este jueves en el marco de una causa judicial en la que se los investiga
por impulsar acciones violentas contra dirigentes políticos e incluso por
sugerir la posibilidad de un atentado contra la vicepresidenta Cristina
Fernández de Kirchner.
Los detenidos durante los operativos de la mañana fueron Jonathan
Ezequiel Morel, referente y vocero de Revolución Federal, y los
integrantes de ese espacio Leonardo Franco Sosa y Gastón
Ezequiel Guerra, quienes pueden ser indagados este viernes,
según informaron a Télam fuentes judiciales.
Las detenciones fueron efectivizadas por la Policía de Seguridad Aeroportuaria
(PSA) por orden del juez federal Marcelo Martínez de Giorgi en el marco de una
investigación que permanece bajo secreto de sumario y que fue delegada en el
fiscal Gerardo Pollicita.
Jonathan Ezequiel Morel. Foto:
Captura tv.
En horas de la tarde, Sabrina Basile, hija
del entrenador de fútbol Alfio "Coco" Basile, quien era buscada por
sus vínculos con el Revolución Federal se entregó a la justicia y fue
trasladada a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), donde quedó
detenida, informaron a Télam fuentes del caso.
Para los investigadores, las consignas y manifestaciones violentas
protagonizadas por Revolución Federal desde mayo de este año pudieron
haber funcionado como "caldo de cultivo, como el discurso de odio que
desencadenó" el intento de asesinato de la vicepresidenta, según
pudo saber Télam de fuentes judiciales.
Las detenciones se activaron durante la mañana luego de que Morel emprendiera
un viaje en micro a Paraná, Entre Ríos, lo que para los investigadores implicó
un riesgo para la investigación, según detallaron a Télam
fuentes del caso.
Morel fue detenido en la ciudad entrerriana, mientras Sosa y Guerra fueron
encontrados en sus respectivos domicilios en provincia de Buenos Aires en el
marco de una serie de 11 allanamientos realizados por la PSA.
En los
allanamientos se secuestraron teléfonos celulares,
computadoras y otros dispositivos electrónicos, además de materiales útiles
para la fabricación de bombas incendiarias, según pudo
reconstruir esta agencia.
La acusación
Los detenidos pueden ser acusados de organizar o formar parte de agrupaciones
que tuvieren por objetivo imponer sus ideas a la fuerza o infundir temor en
otras personas, según explicaron a Télam fuentes con acceso a
la investigación.
El artículo 213 bis del Código Penal establece que "será reprimido con
reclusión o prisión de tres a ocho años el que organizare o tomare parte en
agrupaciones permanentes o transitorias que, sin estar comprendidas en el
artículo 210 de este código, tuvieren por objeto principal o accesorios imponer
sus ideas o combatir las ajenas por la fuerza o el temor, por el solo hecho de
ser miembro de la asociación".
También se les achacaría la supuesta incitación a la violencia colectiva contra
grupos de personas o instituciones y la incitación a la persecución o el odio
contra una persona o grupos de personas a causa de su raza, religión,
nacionalidad o ideas políticas.
Las declaraciones
Las detenciones habían sido solicitadas por el fiscal Pollicita a través de un
extenso dictamen que le presentó el martes al juez Martínez de Giorgi, en el
que enumeró distintas manifestaciones violentas convocadas por Revolución
Federal como así también las declaraciones públicas, amenazantes, esgrimidas
por sus referentes.
Esta agencia pudo averiguar que entre las manifestaciones enumeradas
se encuentra la marcha de las antorchas convocada el 25 de mayo de este año
frente al Congreso de la Nación bajo consignas tales como "Basta de
Cristina", "Basta de Alberto", "Los vamos a sacar" y
"Van a correr".
Otra de las manifestaciones invocada por el fiscal fue la realizada en Plaza de
Mayo el 9 de julio bajo consignas como "Es hora de accionar" y
"Es ahora o nunca", a la que Morel asistió con una guillotina de
utilería de grandes dimensiones.
También fueron considerados por el juzgado y la fiscalía los mensajes
publicados por los acusados en sus redes sociales, sus expresiones en medios de
comunicación y las propuestas que realizaron en diálogos que transmitieron por
Twitter Space, una herramienta utilizada para conferencias o diálogos virtuales.
El 26 de agosto, por caso, durante una de esas charlas que fue titulada
"Hay que pudrirla", una persona que se supone era Morel
proponía infiltrarse entre la militancia kirchnerista que manifestaba su apoyo
a la Vicepresidenta en la puerta de su casa, para llevar a cabo
un ataque, algo que efectivamente ocurrió cinco días después cuando Sabag
Montiel intentó asesinarla.
Esa información fue presentada en el expediente por el titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Agustín Rossi, quien además aportó las grabaciones de otras conversaciones públicas publicadas en redes sociales en las que se hablaba de la posibilidad de atentar contra el presidente Alberto Fernández.
Fuente: Telam