Se trata de los médicos que participaron en la cesárea de la niñita tucumana de 11 años, que había sido violada por su abuelastro en el 2019.
Cecilia Ousset lo celebró en las redes sociales: "amigos, estoy formalmente sobreseída del caso Lucía", escribió en Facebook. Y agregó: "colegas, sin miedo a seguir defendiendo los derechos, sin miedo contras los perversos que obligan a gestar, que ellos vayan a la cárcel, nosotros no. Nunca más se atrevan a tocarnos".
Esa intervención quirúrgica sucedió en condiciones de una
fuerte polémica en Tucumán y todo el país. Según había manifestado la madre de
la niña, en diferentes oportunidades solicitaron la interrupción legal del
embarazo, pero jamás tuvieron acceso a esa intervención. Finalmente, y debido
al avanzado estado de la gestación, los ginecólogos Gigena y Ousset le
realizaron una cesárea.
El procedimiento de la niña de 11 años se realizó en el
Hospital del Este. Ousset y Gigena expresaron en su momento que hasta horas
antes de la cirugía nadie sabía si se iba a hacer o no, y que el hermetismo era
absoluto. “Parecía un operativo clandestino”, dijeron.
Tras explicar que la cesárea era la única opción posible
en función del estado biológico, psíquico y social de la nena, y que cualquier
otro tipo de intervención iba a ser difícil de tolerar para su cuerpo, además
de larga y dolorosa para una gestación de alrededor de 23 semanas (los médicos
del Hospital calcularon 25), remarcaron que la paciente y su progenitora
ratificaron la decisión de seguir adelante cuando les informaron los detalles
del procedimiento.
Como la recién nacida falleció poco después, la fiscal
Adriana Giannoni abrió una investigación contra ambos médicos por el presunto
delito de homicidio. Ayer, finalmente, quedaron sobreseídos.