La idea es reforzar y mejorar la atención a las víctimas de violencia de género y familiares que consultan a diario en el dispositivo.
El Observatorio de las Mujeres y Violencias por Razones de Género incorporó 25 nuevos trabajadores (21 mujeres y 4 hombres), que pasaron a planta transitoria. La decisión fue del gobernador Osvaldo Jaldo ante una solicitud del ministro Gabriel Yedlin.
Se trata de un grupo
de profesionales entre psicólogas, trabajadoras sociales y abogadas que venían
realizando capacitaciones en la temática de género mediante una beca de la
Universidad Nacional de Tucumán, trabajando conjuntamente con el Ministerio de
Desarrollo Social.
Foto prensa Ministerio
de Desarrollo Social -
Por tal motivo Yedlin visitó la oficina del área ubicada en el Hospital Centro de Salud Zenón Santillán para dialogar con las nuevas integrantes del equipo, y lo hizo acompañado de la asesora de Género de la cartera Social, María del Carmen Carrillo; y la directora del Observatorio, Verónica Ale.
Al respecto, Yedlin admitió que “uno de los
temas que más nos preocupan son las violencias y en ese sentido el observatorio
es un lugar muy importante. atiende a las personas que sufren violencia, pero
también a cualquiera que quiera consultar. Hay psicólogos, abogados y
trabajadores sociales que los pueden asesorar y ayudar”.
En relación a las nuevas profesionales incorporadas al Estado, el Ministro afirmó: “Cuando se habla de los empleados públicos se lo hace de manera muy ligera. Pero estos son personas que cuidan, enfermeras, médicos, las maestras, la policía. El Estado tiene que cuidar, dar educación pública y salud pública y agradezco a todos los que trabajan en ese sistema”.
Luego, Carrillo
consideró que la incorporación de las trabajadoras “es un gesto que habla de
la enorme importancia que le da el Gobierno a las políticas públicas de género”.
Posteriormente, la
asesora hizo un balance de año y reflexionó: “Se progresó mucho, con programas
nacionales de género, y a nivel provincial estuvimos a la par de los sectores
más vulnerables”.
Además, admitió:
“Todavía falta mucho. Tenemos que ver cómo reducir los índices de violencia, no
solo en referencia a la mujer, sino también a la niñez o al adulto mayor.
Estamos en una sociedad muy violenta y tenemos que trabajar entre todos y todas
para disminuir los niveles”. Y concluyó: “Tenemos que seguir trabajando
fuertemente en la prevención y en redes de contención interinstitucionales para
alcanzar objetivos”.
Por su parte, Ale
precisó: “Este año van más de 15 mil intervenciones por lo que considerábamos
importantísimo que esto se pueda dar. Hay muchas acciones que se pueden
emprender y justamente fortaleciendo el equipo es posible. Esto es
materializar en acciones concretas las políticas públicas con perspectiva de
género”.
En cuanto a las
expectativas para el 2022, la Directora contó: “Queremos seguir fortaleciendo
la asistencia integral, trabajar a la par de todas las áreas mujer de
municipios y comunas y emprenderemos el proyecto Código Violeta que tiene que
ver con trabajar articuladamente con otras instituciones para minimizar los
obstáculos que se les presentan a las mujeres en la ruta crítica cuando deciden
salir y cortar con el ciclo de violencia”.