Había sido procesado por el juez Luis Rodríguez como partícipe necesario de una maniobra extorsiva desplegada por el falso abogado D´Alessio.
La Cámara Federal porteña revocó este jueves el procesamiento al periodista Daniel Santoro, le dictó la falta de mérito y ordenó realizar nuevas medidas de prueba para avanzar con la investigación de la supuesta tentativa de extorsión al empresario aduanero Gabriel Traficante por la que ya fue elevado a juicio oral el falso abogado Marcelo D´Alessio.
La decisión de revocar el procesamiento del periodista fue compartida
por todos los jueces de la sala segunda del tribunal de apelaciones aunque
hubo posiciones distintas en cuanto al devenir de la pesquisa, según surge del
fallo al que accedió Télam por parte de fuentes judiciales.
El juez Martín Irurzun, en minoría, votó por revocar el procesamiento, disponer
el sobreseimiento del imputado y encomendar la destrucción de la prueba
obtenida violando garantías constitucionales, mientras sus colegas, Eduardo
Farah y Roberto Boico, se inclinaron por la solución la falta de mérito y la
continuidad de la investigación.
El procesamiento
Santoro había sido procesado por el juez Luis Rodríguez como partícipe
necesario de una maniobra extorsiva desplegada por el falso abogado D´Alessio
que le reclamaba dinero al empresario de apellido Traficante a cambio de
evitarle quedar quedar involucrado en la causa judicial por contrabando de
mercaderías conocida como "mafia de los contenedores".
"Daniel Pedro Santoro tuvo un importante rol en el suceso criminal
investigado, teniendo incidencia directa sobre la credibilidad de los dichos de
D´Alessio hacia Traficante, en la intimidación moral que ejerciera sobre éste o
que introduce información falsa para contribuir en una extorsión en
curso", había señalado el juez Rodríguez tras considerar que las
publicaciones del periodista estaban coordinadas con el falso abogado.
De la lectura del fallo del tribunal de apelaciones se desprende que la mayoría
comparte la noción de que existen elementos para sospechar de la supuesta
comisión de un delito, pero que aún no se pudo probar la existencia de un
acuerdo entre Santoro y D´Alessio que coloque al periodista en un rol
delictivo.
Al votar por revocar el procesamiento de Santoro, el juez Boico sostuvo
que “hay conjeturas razonables que, desde un plano objetivo, respaldan las
sospechas albergadas por el juez, pero que no satisfacen el
estándar mínimo necesario que requiere un pronunciamiento en los
términos del artículo 306 del ritual”.
“Lo que falta aún es conglobar los datos que emergen de la secuencia histórica
de los hechos con una prueba que acredite la presencia de la faz subjetiva requerida
por el tipo penal en relación a Santoro, al menos en la hipótesis que aquí se
baraja”, enfatizó.
Por su parte, el juez Farah sostuvo que “no concurren todavía los
presupuestos básicos necesarios para determinar si -como se planteó en
la hipótesis acusadora- Santoro dio un aporte esencial, consciente y
voluntario a la maniobra de un tercero o si -como alegó aquél en su
defensa- su actividad no fue dolosa, se enmarcó en el ejercicio de su actividad
periodística y resulta, por ende, no susceptible de criminalización”.
En posición minoritaria, el juez Irurzun afirmó que “este no es un caso recién
empezado, donde pueda razonablemente esgrimirse la necesidad de profundizar
algo a pesar del tiempo transcurrido”.
“La causa no tiene complejidad y lleva casi cinco años de trámite. El modo en
que fue instruida ha merecido observaciones desde la primera intervención de la
Sala, cuando advirtió sobre demoras y se mandó a activar medidas básicas para
investigar los hechos adecuadamente”, sostuvo el magistrado.
Otra causa
Días atrás Santoro fue procesado en otro expediente, que
tramita ante la justicia federal de Dolores, como supuesto partícipe
necesario de un intento de extorsión al empresario Mario Cifuentes, en la
causa que investiga presunto espionaje ilegal donde también está procesado
D´Alessio.
En ese expediente, el juez Martín Bava dispuso su procesamiento tras recibir el
informe del análisis de los correos electrónicos que, a lo largo de más
de dos años, intercambiaron D’Alessio y Santoro, medida que, según
sostuvo, le permitió “evaluar la calidad del vínculo que estos mantenían, y en
particular, el dolo requerido por las figuras delictivas que le fueron
reprochadas.
Fuente: Telam