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| El Narizudo Diego estaba prófugo desde 2018. |
Lo sorprendieron cargando combustible en una estación de servicios y tras una veloz persecución los efectivos de la Unidad de Investigaciones de Yerba Buena lograron capturar a un peligroso delincuente que se encontraba prófugo de la Justicia desde 2018.
Se trata de Diego Adolfo Barón, conocido como “Narizudo Diego”, de
45 años, quien cuenta con un frondoso prontuario por múltiples hechos de robos
agravados en banda ocurridos en los últimos años, uno de ellos en la Sucursal
del Banco Nación en Monteros. El delincuente estuvo varias veces detenido y ya
cuenta con una condena de la Justicia.
Barón, oriundo de El Manantial, fue sorprendido por la Policía en la tarde del martes cuando se encontraba cargando combustible en una estación de servicios de avenida Belgrano y calle Bulnes. El conocido delincuente conducía un automóvil marca VW Gol, en el que iba acompañado de otros tres hombres.
“Al notar la presencia
policial salieron velozmente por calle Bulnes hacia el sur, lo que generó una
persecución por distintas calles de la Capital, en muchas de ellas los sujetos
circularon en contra mano poniendo en riesgo la seguridad pública. Al llegar a
las avenidas Colón y Roca se les dio la voz de alto policía, y el sujeto que
iba de acompañante sacó un arma de fuego, la remontó y apuntó en contra del
móvil policial. Pero antes de que realizara un disparo el personal le efectuó
un tiro para amedrentarlos que impactó en el sócalo del automóvil”, explicó
el Jefe de la Unidad de Investigaciones Yerba Buena, Lidoro Vizcarra,
quien supervisó el procedimiento.
Al llegar a calle Florida, entre avenida Colón y Baltazar Aguirre, los
hombres descendieron del rodado. Dos lograron fugarse y otros dos intentaron
ocultarse en una de las casas de esa cuadra pero fueron finalmente aprehendidos
por atentado y resistencia a la autoridad.
Al tomar intervención la Unidad Fiscal Especializada en Flagrancia de
Feria y revisar las planillas de antecedentes, se detectó que uno de ellos,
Barón, contaba con una orden de detención desde 2018 por lo que fue trasladado
a la Comisaría de Tafí Viejo. En tanto, el otro, conocido como “Gordo”, de 24
años, fue puesto en libertad por disposición judicial y el automóvil quedó en
calidad de secuestro para su investigación.