La Entidad Binacional Yacyretá informó, además, que se avanza en las obras de la nueva central de Aña Cuá.
Las dos turbinas fabricadas por el consorcio
encabezado por la empresa de tecnología e infraestructura Impsa, es parte de la
primera etapa en la que se reemplazarán 6 de las 20 turbinas.
La Entidad Binacional Yacyretá (EBY) puso en
funcionamiento este miércoles, en la localidad correntina de Ituzaingó, dos
nuevas turbinas que permitirán mejorar la eficiencia y ampliar la capacidad de
generación, en un acto encabezado por el presidente de Paraguay, Mario Abdo
Benítez.
El mandatario y los directores de la compañía, el argentino Ignacio Barrios
Arrechea y el paraguayo Nicanor Duarte Frutos, asistieron además a una detonación
controlada como parte del avance de las obras de construcción de la represa Aña
Cuá.
Las dos nuevas unidades de generación de energía -las turbinas U1 y U3- fueron
puestas en marcha en la central hidroeléctrica ubicada sobre el río Paraná,
luego de 26 años de servicio de las antiguas máquinas, informó el ente
binacional tras el encuentro en Ituzaingó.
Asimismo, se dio inicio al programa de excavación en piedra de la central
hidroeléctrica que se construye en el brazo Aña Cuá, con la detonación de la
primera voladura de una serie que se extenderá hasta febrero de 2021.
Los trabajos que se están realizando son construcción de obras temporarias
(ataguías, caminos, líneas eléctricas de obra, campamento, obradores,
comedores, plantas de hormigón, planta de trituración, polvorín), excavación de
suelo en zona de casa de máquinas, canal de aducción, canal de restitución y
bombeo para control de agua.
Abdo Benítez, quien llegó acompañado del vicepresidente Hugo Velázquez,
consideró "un hecho histórico la puesta en marcha de estas dos turbinas
que van a mejorar la calidad y la producción de la Entidad Binacional
Yacyretá", y subrayó "el concepto de binacionalidad que permite
fortalecer Yacyretá como una empresa única, que tiene dos accionistas, pero es
una empresa única”.
A su vez, Barrios Arrechea, destacó que “estos procesos permitieron y van a
permitir un gran ahorro en tiempo para la rehabilitación de las próximas
turbinas, lo que significa más producción, más energía y más vida útil”.
El proceso de rehabilitación de las turbinas U1 y U3 demandó 15 meses de
trabajo de más de 150 especialistas del Departamento Técnico de la EBY, con la
supervisión de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Misiones
(UNaM) y el Consorcio Internacional CAPY (Impsa-CIE).
De acuerdo con lo explicado por la compañía, las turbinas que se pusieron en
marcha se encuentran dentro del programa estratégico para la recuperación del
parque generador y el recambio realizado representa una extensión de la vida
útil de entre 30 y 40 años.
Las dos turbinas fabricadas por el consorcio encabezado por la empresa de
tecnología e infraestructura Impsa, es parte de la primera etapa en la que se
reemplazarán 6 de las 20 turbinas, tras registrarse fallas en las máquinas
originales de fabricación alemana.