Eric Torales concurrió el 14 de marzo último a la fiesta de cumpleaños de su prima en Moreno tras haber llegado de EEUU, y contagió a varios invitados, entre ellos su abuelo que falleció. Dos días después de la fiesta dio positivo para coronavirus.
La Cámara Federal de San Martín confirmó el procesamiento y embargo por 50
millones de pesos para el joven que, en marzo pasado, fue a una fiesta de 15
años en la localidad bonaerense de Moreno tras haber llegado de Estados Unidos,
y contagió coronavirus a varios invitados, entre ellos su abuelo que falleció.
Se trata de Eric Torales, quien quedó camino a ser enviado a juicio oral
acusado de propagar una enfermedad "peligrosa y contagiosa de modo
culposo, agravado por el resultado de enfermedad y muerte", según el fallo
del Tribunal de Apelaciones al que hoy tuvo acceso Télam.
Los camaristas remarcaron que Torales tuvo una actitud "imprudente y
negligente" el 14 de marzo último cuando fue a la fiesta de 15 de su prima
en el salón "Alma de Hornero" en Moreno, donde hubo cien invitados
más el personal que trabajó en el lugar.
El joven violó la disposición que regía en ese momento de "aislamiento
obligatorio" dispuesta por el Poder Ejecutivo a través del decreto
260/2020 que imponía un confinamiento de 15 días a todos los viajeros llegados
desde el exterior para "evitar la introducción y/o propagación de la pandemia
Covid 19".
El joven quedó camino a ser enviado a juicio oral acusado de propagar una
enfermedad "peligrosa y contagiosa de modo culposo, agravado por el
resultado de enfermedad y muerte"
Torales había vuelto de vacaciones desde
Estados Unidos y "estaba comprendido dentro de esa prohibición",
remarcó la Cámara.
"Generó las circunstancias adecuadas para poner en riesgo la salud
pública", concluyeron los camaristas sobre el acusado, quien estuvo
internado y ahora permanece en libertad.
"Ha de tenerse en cuenta que en el momento en que ocurrió el hecho
imputado, las medidas y esfuerzos gubernamentales estaban centrados en mitigar
la propagación e impacto sanitario del virus -que ya estaba disperso en otras
regiones de varios continentes-, de allí las disposiciones restrictivas en
relación con quienes ingresaban al país", recordaron los jueces.
El riesgo "era conocido por el imputado, no sólo por la difusión pública
de la situación a nivel mundial, sino porque también implicaba un protocolo
distinto al momento de su arribo al país", que incluyó completar una
declaración jurada en el aeropuerto de Ezeiza.
Los jueces Juan Pablo Salas, Marcelo Fernández y Marcos Morán confirmaron el
procesamiento y el embargo, fijado para cumplir con eventuales demandas civiles
que puedan presentar asistentes al evento.
La defensa del joven argumentó que desconocía por completo ser portador del
virus, que no tenía síntomas y aludió a la "posibilidad de que hubiera
otros focos de contagio en el mismo evento", algo que la Cámara descartó.
Fuente: Telam