En estas épocas de pandemia, el gran protagonista del año festeja su día. ¡Amor Eterno al Mate!
El mate es algo más que lo simbólico del
pueblo argentino, es una costumbre que conecta, que trasciende lugares, edades
y estratos sociales. Se vincula con las emociones, acerca a quienes están lejos
y ofrece disfrutar de un momento con quien esté cerca. Según dicen y en simples
palabras, el mate genera felicidad.
Desde 2016, cada 30 de noviembre, se festeja
el Día Nacional del Mate en honor al caudillo Andrés Guacurarí y Artigas, más
conocido como “Andresito”.
Es oportuno recordar, también, que la palabra mate nace
del vocablo quechua 'matí', que significa calabaza, y que históricamente fue
el recipiente y material en el que más se tomaba.
Por otro lado la bombilla se denominaba tacuarí y era simplemente una
cañita ahuecada. Las formas de disfrutar el mate se fueron modificando con el
tiempo, pero lo que se mantiene intacto es la costumbre de disfrutar esta infusión
tan representativa de nuestro país.
El mate es la bebida nacional elegida en el
90% de los hogares argentinos. Es un alimento muy completo por
sus beneficios como protector de enfermedades metabólicas y
degenerativas de la salud humana, por sus propiedades antioxidantes y
energizantes que aportan su gran cantidad de polifenoles, vitaminas del complejo
B, potasio, magnesio y xantinas.
Este va a ser el primer año que los fanáticos
del mate no podrán asistir al evento más importante de la industria yerbatera
que suele organizar el Instituto Nacional de Yerba Mate: MATEAR.
Sin embargo se está invitando a que los
argentinos y argentinas se sigan cuidando
entre todos para estar presentes en la tercera del 2021 y convocan a celebrar
el Día del Mate en la nueva normalidad a través de las redes sociales.
Así lo han pensado algunas empresas
productotas de yerba, entre ellas CBSé que sostiene que “el mate tiene un valor
emocional y social hoy más que nunca: ¡Amor eterno al mate!”, concluye Sol
Orquera, CEO de CBSé, quien además expresó: “Ya sabemos que el mate
reúne infinitas razones para elegirlo. Porque el mate nos acompaña en cada
momento, aun cuando debemos cambiar hábitos, moda, planes y hasta de
prioridades. El mate nos conecta con nuestros afectos,
nuestros mejores recuerdos, risas, charlas, silencios, con las
personas que vemos a diario y también las que más extrañamos. En este tiempo,
aprendimos a disfrutarlo de otra manera, cada uno con su mate, pero
con las mismas ganas de compartir que siempre”.
Fuente: mek.comunicación.com