El proyecto prevé un gasto del capital del 2,2% del Producto Bruto
Interno, y contempla destinar más del 60% de los recursos a gastos sociales.
El Gobierno nacional enviará este martes a la Cámara de Diputados el proyecto de Presupuesto 2021, que prevé un déficit equivalente al 4,5% y un gasto del capital del 2,2% del Producto Bruto Interno, y contempla destinar más del 60% de los recursos a gastos sociales.
La iniciativa será enviada en tiempo y forma, como establece la Ley de
Administración Financiera, que fija como fecha tope al 15 de septiembre para
presentar el proyecto que establece el detalle de gastos y recursos para el año
siguiente, así como las previsiones de crecimiento del PBI, el valor del dólar
y la evolución de la inflación.
El primer proyecto de Presupuesto 2021 de la gestión del presidente Alberto
Fernández que se presentará ante la Cámara de Diputados demandará al menos un
mes de debate, en cuyo transcurso los funcionarios explicarán cada uno de los
aspectos centrales, los datos macroecónomicos, los subsidios al transporte, las
obras públicas y las relaciones con las provincias.
El tratamiento se efectuará en un cuerpo legislativo donde existe una fuerte
paridad de fuerzas ya que el Frente de Todos tiene 117 votos -teniendo en
cuenta la licencia del funcionario José de Mendiguren y que el presidente de la
Cámara, Sergio Massa, solo vota en caso de desempate- y Juntos por el Cambio
116.
En ese marco, los votos de los interbloques Federal y de Federal para el
Desarrollo adquieren una fuerte relevancia al convertirse en los árbitros para
definir la aprobación del presupuesto, ya que Juntos por el Cambio es difícil
que vote a favor luego de la pelea que está planteando por la copartacipación
de la ciudad de Buenos Aires.
Además, junto con la sanción del proyecto de presupuesto se deberá sancionar la
nueva ley de movilidad jubilatoria, donde se fijará cómo se actualizarán en el
2021 las jubilaciones, pensiones, asignaciones familiares y por Hijo, a cuyo
pago se destinan junto con los planes sociales más del 60 por ciento de los
recursos previstos para el próximo año.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, señaló que los cinco objetivos
del Presupuesto son "inclusión social, que requiere crear trabajo;
dinamismo, agregar valor a la producción; estabilidad, que requiere que el país
a medida que se recupera genere condiciones para que las exportaciones crezcan
y no volver a chocar con un problema de falta de dólares; equidad regional,
para que el desarrollo sea federal, y soberanía económica".
El ministro ratificó que el déficit previsto será del 4,5 % y dijo que
"dentro de ello hay una redefinición de prioridades, porque el gasto de
capital se duplica respecto del de 2019. Va a ser de 2,2% del producto, y
este es un rubro fundamental para la recuperación, porque hay un multiplicador
macroeconómico grande asociado a la expansión de la obra pública, que le
permite al sector privado enfrentar un ambiente más vibrante en condiciones de
demanda".
En un reportaje al diario La Nación y al ser consultado sobre las vías del
financiación, Guzmán dijo que se espera que "el financiamiento por parte
del Banco Central vaya bajando, aunque no se va a poder prescindir del todo por
un tiempo".
"Por eso buscamos normalizar las finanzas públicas, ir reduciendo las
necesidades de financiamiento por parte del Banco Central, e ir bajando la
inflación, que es un objetivo central", agregó el titular del Palacio de
Hacienda.
Guzmán también puso en valor que el presupuesto "establece proyecciones
plurianuales y busca marcar el horizonte por el cual la Argentina va. Es un
camino de consistencia macro y es normal que tras el colapso del sistema que
rigió entre 2015 y 2019 haya falta de confianza. Creemos que la Argentina va a
transitar ese camino, pero no sucede de un día para el otro la resolución de
estos problemas".
También confirmó que el Gobierno no mantendrá el próximo año los planes de
Ingreso Familiar de emergencia (IFE) y de Asistencia de Emergencia al Trabajo y
la Producción (ATP), al sostener que "se asume que esas partidas eran necesarias
en forma extraordinaria por la pandemia".
El primer presupuesto de la gestión del presidente Alberto Fernández se
realizará en la misma jornada que la comisión de Presupuesto y
Hacienda-conducida por Carlos Heller-comenzará a debatir el proyecto que
permite refinanciar las deudas entre las provincias y la Anses.
El grupo parlamentario recibirá ese día a funcionarios del Anses que darán
detalles como se renegociarán los prestamos por ese organismo y que establece
un nuevo mecanismo para pagar la reparación histórica para evitar la venta de
activos del FGS.