La expresidenta presentó su libro en Santiago del Estero y dejó definiciones políticas.
La ex mandataria presentó su libro en el Fórum —una vieja estación de trenes refaccionada durante su gestión— ante cientos de seguidores y militantes que se acercaron, entre ellos, el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora. La precandidata a vicepresidenta dejó varias impresiones políticas.
Con los ecos del anuncio de la fórmula presidencial de Cambiemos, que llevará como vicepresidente al senador Miguel Ángel Pichetto, y la visita de los representantes de la coalición encabezada por el PJ a las oficinas de Sergio Massa para terminar de llegar a un acuerdo que lo incorpore al espacio donde competirá la fórmula Fernández-Fernández, la ex presidenta Cristina Kirchner presentó su libro Sinceramente en Santiago del Estero, ante una multitud de seguidores.
"Estamos a tiempo de mirar lo que nos pasó, lo que nos está pasando y, a partir de allí, poder construir una mirada común, que no quiere decir pensar igual, pero sí llegar a un acuerdo básico que nos permita pensar un futuro para nuestros hijos e hijas", alentó la precandidata a vicepresidenta a horas del cierre de alianzas.
La ex mandataria presentó su libro en el Fórum —una vieja estación de trenes refaccionada durante su gestión— ante cientos de seguidores y militantes que se acercaron, entre ellos, el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora. La precandidata a vicepresidenta dejó varias impresiones políticas. "A lo malo hay que encontrarle la parte buena. ¿Qué tiene de bueno este momento? Hemos podido comprobar en un muy corto plazo, en tres años y medio desde que el nuevo gobierno llegó a la Casa Rosada, que todo lo que nos decían que teníamos que hacer, para no terminar en la situación de crisis económica en la que estamos, no era cierto. Teníamos razón", expresó Cristina, pero reconoció que "sin duda, hay cosas de la política económica del kirchnerismo que se deberán reelaborar".
"Teníamos razón en no abrir las exportaciones para que se destruya la industria nacional, teníamos razón en que había que fortalecer el mercado interno e impulsar el consumo, teníamos razón cuando decíamos que había que reservar los dólares para la industria. Decían que si le pagábamos a los fondos buitres iban a venir miles de millones de dólares de inversión; les pagamos y no vinieron inversiones sino que volvió el FMI", enumeró la ex presidenta.
En ese tono, Cristina valoró la decisión de Néstor Kirchner al renegociar la deuda con el FMI. "Nos habían hecho creer que no se podía sin el FMI, pero Néstor nos demostró que podíamos tener un país con autonomía y desarrollo industrial", subrayó la ex mandataria, quien comparó aquel pagó de 9 mil millones de dólares con la deuda acumulada en los tres años y medio de gestión de Cambiemos, que alcanza los 57 mil millones de dólares de préstamo del Fondo. "Sería una mentirosa si les digo que todo se va a solucionar mágicamente con un endeudamiento brutal como el que hemos tenido", lamentó la expresidenta.
"Cuando me agarran la mano fuerte, la aprietan y me dicen: ¡Volvé!", graficó Cristina las escenas que vive en los actos públicos y le reflejan la crisis social y económica, pero volvió a defender su decisión de no encabezar la fórmula presidencial. "Yo ya fui presidenta y siento que tengo que poder ayudar y colaborar a terminar con esta catástrofe social y económica que viven los argentinos y argentinas. Pero sentí la necesidad de dar un gesto, de despojarme de todas las vanidades legítimas que tiene un ser humano. Dar testimonio de que, en serio y definitivamente, estamos dispuestos a ayudar y unir a los argentinos en un momento difícil para todos y para todas", sostuvo.
En esa línea fue que la ex mandataria dejó la definición más cercana a lo que en las próximas horas podrá ser la confirmación de una alianza del PJ con el Frente Renovador: "Podemos sentarnos a hablar y a cotejar las cosas que se hicieron mal. Tengo grandes esperanzas de que los argentinos y las argentinas podamos encontrar el camino", concluyó.